Cada vez que oigo la frase esa de que «el hombre es el animal más inteligente» me entra la risa floja. Se me ocurren mil ejemplos de cómo otros animales se lo montan mucho mejor, aunque no tengan televisiones de cincuenta y dos pulgadas ni apps en el teléfono para medir sus biorritmos mientras duermen.
Pero eso son ejemplos que se me ocurren a mí, y no hay que irse tan lejos para demostrar que el ser humano es bastante tonto. Aquí va un ejemplo del día a día, algo que todos hemos visto y criticado pero que sigue sin cambiar: cuando alquilas un coche te ponen todas las llaves en el mismo llavero.
Y no lo puedo entender. Porque seguramente se ahorran una pasta en llaveros (tienen que hacer la mitad) y tendrán la sensación de que es más difícil que se pierda o les roben una llave, pero según lo veo yo con este sistema sólo consiguen dos cosas:
- Que el llavero sea rematadamente incómodo y necesites una mochila para llevar las llaves del coche.
- Que si pierdes las llaves tengas que romper la ventanilla del coche y hacerle un puente para devolverlo.
De momento he tenido suerte.
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