Let’s go Blue Jays!

En los últimos diez días he visto más béisbol que en todo el resto de mi vida junta. Los Blue Jays, el equipo de Toronto, están jugando la World Series por primera vez en treinta y dos años y claro, han salido fans del béisbol hasta de las alcantarillas. Algo parecido a lo que vivimos cuando los Raptors ganaron el anillo de la NBA en 2019, pero más intenso porque, aunque es difícil de creer, aquí el béisbol es más popular que el baloncesto. Y no os dejéis engañar por el nombre que la Series de World no tiene nada: se trata de la final de la liga de Estados Unidos, en la que juega un equipo canadiense.

Si en una semana he visto más partidos que en cuarenta años ya os imagináis que no es mi deporte preferido. Soy el primero en reconocer que me estoy sumando a la fiesta en el último momento con descaro y buscando en DuckDuckGo y ChatGPT las normas para entender lo que está pasando. Al menos este año lo tengo más justificable porque hemos ido al estadio dos veces, que al cachito-carne le entró FOMO (expresión muy americana, Fear of Missing Out) porque alguien hablaría de béisbol en el cole y nos pidió ir. Y mira, no voy a desperdiciar una excusa para ir a ver deporte en directo, sobre todo cuando el béisbol tiene las entradas más baratas de todos los equipos de Toronto y los perritos calientes más grandes.

Padre e hijo comiendose un perrito caliente enorme durante un partido de los Blue Jays de Toronto.
Con un perrito cenamos los dos.

Lo que pasa es que el béisbol no es un deporte que puedas sentarte a mirar sin tener ni idea y que te guste. Hay que prepararse mentalmente y escoger entre los dos tipos de fan que pueden soportar más de tres horas de partido en las que la mayor parte del tiempo realmente no pasa nada:

  • Friki de la estadística. Imagino que apuntar cosas empezó como forma de pasar el rato, pero ahora el béisbol es el deporte donde más se mide todo. Me refiero a que te sacan estadísticas tipo «media de aciertos del bateador en partidos de play-offs contra pitchers zurdos que llevan menos de veinticinco lanzamientos cuando hay dos bases ya ocupadas». Los fans de este grupo tienen que ver cada detalle, saberse todas las normas de memoria,y explicar constantemente por qué pasa lo que pasa o por qué una acción en la que no pasa absolutamente nada es interesantísima. Esto del béisbol como un juego de estadística más que un deporte lo explican muy bien en la peli Moneyball.
  • Fan del buen rato. Como no es un deporte en el que tengas que estar atento a ver si pasa algo (porque la mayor parte del tiempo no pasa, y cuando pasa te da tiempo a mirar y no perdertelo), es perfecto para ir a disfrutar de la charleta, el bocadillo (o perrito gigante), las pipas, y las cervecillas. Cuando hay partido los domingos por la mañana montan un montón de juegos para niños por el estadio, y puedes pasarte fácil una hora en los jueguecillos sin mirar el partido. La mayor parte de esa hora es haciendo cola porque hay un montón de gente haciendo lo mismo: pagas entrada y vas al estadio para pasarte una hora esperando en otra parte. Pero es lo normal, y es parte de la experiencia del fan del buen rato. Yo obviamente soy parte de este grupo, aunque reconozco que doce años después lo encuentro más entretenido.

Volviendo a esta semana, Toronto es una ciudad que se vuelca con sus equipos durante los playoffs. El resto de la temporada ves asientos vacíos en los estadios y oyes mucho «ah, no sabía que ayer había partido», pero cuando empieza a oler a posible victoria no se habla de otra cosa, literalmente. Esto ya me lo explicó mi padre hace muchos años, una noche entre semana que había Champions y le pregunté por qué se estaba tragando un pedazo de bodrio de partido si no era fiel seguidor de ningún equipo y en realidad le daba igual el resultado, y me explicó que al día siguiente tenía una cita en el trabajo y si llegaba sin tener nada que decir sobre el partido se iba a quedar excluído y no iba a conseguir hablar de las cosas que tenía que hablar. Es la historia que le he contado a la cacho-wife varias veces en la última semana para convencerla de que teníamos que ver los partidos, y una inversión que empezó a pagar dividendos rápidamente en el primer partido de la final porque al día siguiente pudimos hablar de cómo los Blue Jays hicieron historia marcando nueve carreras en una entrada.

Camiseta de Andrés Giménez como jugador de los Blue Jays de Toronto.
En un partido este año regalaban camisetas de un jugador con un nombre estupendo: Andrés Giménez. De los Giménez con G de toda la vida.

Para que os hagáis una idea de cómo el béisbol ha dominado nuestra vida en la última semana, me refiero a un nivel que yo sólo he vivido cuando España se clasificó para la final del Mundial de Fútbol. No es que los telediarios abran con el béisbol y cierren con «and let’s go Blue Jays», es que en toda la semana no han dicho nada de que el sábado cambiamos la hora cuando lo normal es dedicar horas a hablar de si es necesario el cambio o no. Es que en todas las llamadas de trabajo hay varias personas con camiseta o gorra del equipo. Es que los autobuses de la ciudad han reprogramado los cartelitos de delante para que alternen entre mostrar la ruta que sirven y poner el logo del equipo y «let’s go Blue Jays». Es que al cruzarte con alguien por la calle en vez de «buenos días» o «sorry» (esto es Canadá al fin y al cabo) te dicen «go Jays go».

Es que esta noche es Halloween, una de las fiestas que más se celebran y seguramente la que saca más gente de casa (disfraces, truco o trato, fiestas en casas y bares), y hoy tenemos todos clarísimo que a las 20:00 hora del Este no va a quedar ni un alma en la calle… y que si el partido sale bien, a medianoche esta ciudad va a ser una fiesta descomunal de la que estaremos hablando durante años. ¿Y si no sale bien? Pues vamos al séptimo partido mañana.

Let’s Go Blue Jays.

¡No esperes a que los algoritmos te enseñen este blog!
Activa tu suscripción para recibir las nuevas entradas por RSS o en tu correo:


Comentarios

7 respuestas a «Let’s go Blue Jays!»

  1. que pasa crack, …, yo he visto bastante beisbol porque alguien MUY cercano se dedicaba a ello cuando se empezó a jugar por estos lares del viejo continente y he visto algunos de sus partidos en vivo…, por cierto he de mencionar que estaba en el segundo equipo de una gente que se codeó con los mejores del viejo continente y ganaron algunos de los títulos continentales de aquí contra algunos de los mejores equipos de su momento. Aunque aquellas generaciones tenían que compaginar ser mécanicos o panaderos, oficios humildes, entre cada entrenamiento y partido para sacar a su familia adelante. Hoy en día la mayoría de aquellos clubs han cerrado porque dependieron de la calidad generacional de los jugadores que decidieron no fichar por grandes o emigrar. He de mencionar que en mi ciudad (la cual no mencionaré pero tú sabes cual es) todos los equipos jugaban en la única cancha (muy conocida durante décadas, desaparecida y hoy en día reabierta «más o menos» cerca del lugar original) Obvio que en aquel entonces disfrutarlo era complicado por ser difícil de entender y por una cuestión intelectual de la juventud, pero a base de verlo y seguir viendo partidos sueltos a lo largo de los años he llegado a entenderlo más o menos bastante, …, lo aprecio mucho pero no es para mi (en cuanto a practicarlo me refiero) Por otro lado hay que decir que por algún motivo que desconozco, en todo el continente americano desde el norte más gélido a la punta del sur en ese cabo infernal, hay una gran tradición y en muchos sitios podría ser el segundo o incluso primer deporte en cuanto a popularidad. Hay cierta gente maja de cierta isla que a lo largo del tiempo se ha dedicado a recordárles a esos pesados de las World Series que no siempre son los mejores, de lo cual siempre me he sentido MUY orgulloso. Me gusta ver la camiseta y sobre todo el número, tú sabes porqué…, JAJAJAJA, gracias por los buenos recuerdos y a cuidarse.

    1. por supuesto «LET’S GO JAY’S, GO!»

      1. Te faltaba esto 😛

    2. Pues gracias a este comentario acabo de mirar y enterarme de que hay una liga de béisbol en España. Pero se me ha desinflado la ilusión rápido: los equipos con más títulos son F. C. Barcelona y Real Madrid C. F. Qué cansinos, por favor.

      Y sí, el béisbol tiene la fama de muy estadounidense pero si miras las plantillas de los equipos un porrón de jugadores y varias de las super estrellas vienen de Puerto Rico, Venezuela, República Dominicana, Cuba, Japón…

      1. bueno, ahora los farçantes e irreales de trampa$ habrán tomado el control por eso de la pasta, pero piensa que hasta los 90 eran equipos tipo «Picadero» en Barna o «Piratas» en Madrid que se jugaban el honor con la divisón de beisbol del mismísimo Rayo Vallecano, Copas de Europa de Beisbol incluidas eh, …, por cierto en Picadero creo que se forjó el padre de Rafa y Tomás Jofresa pero no estoy muy seguro, ,…, he mirado si acaso «Blue Jay» era un algún tipo de petirrojo azul (seguro que tienes buena memoria y tú y otra persona nos reiremos con alegría de aquello por siempre) pero son lo que aquí llamamos «charras» o «azulejos» según la zona,…, voy a pintar alguno como homenaje…, venga esos equipos de la gente, de patio de colegio POR SIEMPRE, otro día hablamos de rugby y te cuento historias del propio Ramiro de Maeztu y de cómo alguien que conozco mucho y muy bien, fundó Filosofía y Letras…, robado a lo «Sonic Gate» y refundado en 2019, …, ENORMES!

  2. Avatar de Pah-put-xee

    Si, está siendo histórico. Incluso aquí en Europa algunos estamos atentos a los resultados y sin llegar a tragarnos las 18 entradas del 3º partido, si pudimos ver las 9 carreras en una entrada. Es emocionante que un equipo «pequeño» (con todos los respetos) pueda plantarle cara a los «grandes» en los que un solo jugador (Ohtani, mas de 100 millones de dólares, ¡me sé hasta el nombre de algún jugador!) cobra casi la mitad de todo el presupuesto del otro equipo. A mí me pasó con el «Estu» cuando el siglo pasado (año 1992) se clasificó para la final four de la Euroliga de baloncesto en Estambul, y allí nos fuimos mis padres, mis hijos y mi mujer, metiendo por primera vez en un avión a la abuela con más de 60 años y a mis hijos menores de 10 años.
    Este año, por primera vez en mi vida, fui a ver un partido de béisbol en directo, fue de los Blue Jays y lo disfruté. ¡Me alegrará enormemente que se coronen! ¡Go Jays go!

    1. Hombre es que ir con los que ganan es muy fácil, ser de los Blue Jays nos parece mejor, y el que no baile es merengón….

      Hay por ahí un vídeo comparando el sueldo por segundo de Ohtani con el de Yesavage y es ridículo.

      ¡Equipos de patio de colegio al poder!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *